21 mar 2014

El Gobierno también debe reactivar el diálogo social en las Administraciones Públicas

El diálogo social debe favorecer el crecimiento, la creación de empleo y la mejora en la calidad de los servicios públicos

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) reclamó hoy al Gobierno que reactive también el diálogo social en el marco de las administraciones públicas, para favorecer el crecimiento, la creación de empleo, la mejora de la calidad en los servicios públicos y en definitiva, para ayudar al país en la salida de la crisis.

Este diálogo social lleva interrumpido desde 2010. El Gobierno señaló ayer en un comunicado la necesidad de evaluar las políticas salariales y de empleo en el sector público.

Pues bien, CSI-F como sindicato más representativo en este ámbito, reclama el inicio de este diálogo al más alto nivel, con la participación de Presidencia del Gobierno y desde luego, con el papel principal como responsable de las políticas de este ámbito del ministro de Hacienda y Administraciones Públicas.

CSI-F defiende un marco de diálogo y colaboración con los agentes sociales para convertir a las administraciones públicas en un motor de crecimiento para favorecer también el cambio de ciclo económico con acciones concretas que permitan modernizar las estructuras y dignificar el papel y las funciones de los trabajadores.

Para ello se hace preciso situar a los empleados públicos en el centro de las reformas con un papel protagonista, promover la carrera profesional, incentivar a los profesionales conforme a unos objetivos consensuados con la Administración que favorezcan la productividad, la prestación de servicios de calidad, la valoración del desempeño.

Además, se hace preciso desarrollar un plan de recursos humanos para reforzar las plantillas en aquellos puntos de la administración que sea preciso, con estos mismos criterios de profesionalidad. Las administraciones también deberían ser un ámbito de creación de empleo de calidad. Ha llegado la hora de pasar página a los recortes, detener la sangría en el empleo público y establecer un marco jurídico que permita impulsar una administración estable y eficaz, frente a los errores y los excesos cometidos en la gestión pública.

De hecho, CSI-F coincide con el Gobierno en la necesidad de combinar políticas que hagan sostenibles las cuentas públicas con el impulso de la actividad económica y la inversión productiva para generar empleo y garantizar una protección social adecuada.